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Arquitectos: Salba
- Área: 290 m²
- Año: 2020
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Fotografías:Juan Salamanca Balen
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Proveedores: Terratec
Descripción enviada por el equipo del proyecto. La ranchería Walirumana está ubicada a 20 kilómetros al norte de Uribia, implantada en el costado que la vía que lleva a Puerto Colombia, en el departamento de La Guajira. Las condiciones socio ambientales en las que viven muchas de estas comunidades wayuu son complejas. El desierto que se extiende por toda la región hasta territorio venezolano, es un determinante que ha impedido el desarrollo normal de esta cultura indígena. La dificultad para generar una economía de producción y consumo, la falta de infraestructura para comunicar estas comunidades y brindar servicios básicos, sumado a otros factores, han generado unas condiciones de vida muy difíciles.
La flexibilidad del espacio está pensada para que el centro pueda funcionar a diferentes horas con un público variado. Las puertas giratorias de los extremos y en el centro del edificio permiten adaptar el espacio interior a un uso en particular. En primer lugar, manteniendo cerrada todos los módulos, se genera un salón para 50 estudiantes y un aula auxiliar con capacidad para 12 que sirve también como biblioteca. Por otro lado, cuando los módulos centrales se abren completamente, este espacio principal se vincula a la cocina y al bebedero. En estas dos circunstancias, las ventanas de color caen de los muros de guadua y se convierten en los pupitres para los estudiantes o mesas del comedor. Finalmente, cuando estas mesas se guardan y el módulo de la cocina se cierra, se genera un espacio abierto bajo sombra donde los artesanos puedan ir a practicar su oficio.
Muchos de los elementos presentes en la memoria colectiva Wayuu se materializan en el edificio. Al igual que en la arquitectura local, la escuela utiliza la tierra como componente principal, pero materializada de manera diferente, bloques de tierra comprimido. Esto permite generar unas celosías en los muros para ventilar el espacio interior y diseñar un patrón típico Wayuu. La cubierta en plegadura hace referencia a las montañas que se alzan en medio del desierto y son de gran importancia no solo por ser referentes en medio del paisaje, también por su connotación en la cosmología wayuu. Finalmente, la textura generada por la guadua en los muros del salón principal, es una reinterpretación del patrón visible en las construcciones locales cuando es el paso del tiempo deja en evidencia el esqueleto interno del bahareque.